Monokinis…

 

 

Desde que nacimos, en Alawa hemos tenido una prenda como bandera y símbolo de nuestra marca, nos referimos al “monokini”. 

 

El habernos especializado en el traje de baño entero nos ha llevado a incursionar en las diversas posibilidades que presenta este formato tan clásico y moderno a la vez. El “monokini”  aparece en Alawa en el intento de buscar una solución para tantas mujeres amantes de la elegancia del traje de baño de una pieza pero con características anatómicas que les suponían grandes problemas a la hora de usar esta opción.

 

 

Tener diferencias  de talla entre la parte de arriba (pecho y espalda), y la de abajo (cadera y muslos) es una de estas dificultades, pero otra no menor es un tronco más largo o más corto del standard que usan las tallas para sus escalados ordinarios.

El monokini nos da el efecto visual de un traje de baño clásico de una sola pieza, pero está compuesto por dos piezas: un top y una braguita. 

Con esta característica se abren muchas posibilidades  donde jugar. Las variaciones de alto o corto del conjunto y las tallas tanto del pecho como de la cadera. Todo puede tener proporciones distintas pues el monokini nos dará la posibilidad de combinar diferentes tallas, así como de fruncir o estirar más la braguita, o la unión de la parte de arriba con la de abajo.

Si bien cada monokini es pensado como una unidad y se diseñan ambas piezas para ser partes de una sola prenda, permiten múltiples combinaciones entre ellas. Esto aporta una elemento mucho más personal y creativo del “look” resultante. Personalizar colores, diseños, tejidos y tallas hace que tu modelo termine siendo único y que exprese tu estilo más personal.

 

Para las partes de arriba en Alawa hemos querido responder a diferentes necesidades morfológicas y es por eso que proponemos diseños diversos, ya sea un estilo “blusa”,  como el Top Vilma, o un escote “palabra de honor”, como el Top Rose, o el Top Florence. Los tirantes dejan de tener solamente un rol funcional y pasan a ser partes esenciales en el diseño estético. Un claro ejemplo son las diferentes versiones del Top Covadonga , el Top Amelia o el Top Rose Corona.

La manera de fusionar una parte con otra también da lugar a diferentes formas según las características del top o la altura de la braguita.

Nuestra baraguita más alta es la del modelo “Rose”, este modelo permite ajustar la altura y el cavado de la cadera. Esto se consigue con unos cordones internos en las caderas que fruncen el tejido en los costados o lo estiran según el efecto que se quiera conseguir. Las tejidos con textura en la braguitas altas refuerzan aún más el efecto modelador de esta prenda tan cómoda como femenina (Braguita alta Cecilia).

La braguita Vilma es de altura media y da lugar a tops con un estilo “blusa” o “camiseta” que tienen mayor recorrido sobre el vientre. Las tablas verticales con que está rematada la abertura principal se superponen al top dando unidad y armonía a la fusión de ambas partes.

El formato del monokini abre también otro abanico de posibilidades: el de la combinación de tejidos y colores. La singularidad de cada pieza no se pierde en el conjunto. Es más, los colores diversos y hasta los tejidos de diferentes texturas aportan un valor agregado a los estilismos que se pueden crear. Una misma braguita con diferentes tops transforma a una prenda prenda en varios trajes de baño, todo dependerá de las combinaciones que creemos al mezclar los diferentes modelos. 


Como ejemplos de texturas que aportan un concepto mas sofisticado a los conjuntos están las telas con lunares biselados (Top Vilma Lunares), o aquellas que incorporan Lurex o relieves de estilo “jaquard” en las tramas (Top Vilma Lurex, o Top Rose Topitos). 

Otra prueba de la gran versatilidad del monokini es el uso de una de sus partes con ropa no propiamente de baño. Los tops pueden usarse con faldas, pantalones, o vestidos extendiendo el uso del traje de baño a más ámbitos. Esta funcionalidad del monokini es sumamente trascendente, pues hace saltar el traje de baño de su “habitat” natural a otras esferas de nuestra vida. 

En cuanto a la afección en la morfología del cuerpo el monokini es el mejor aliado. Por su propia arquitectura define mucho más la figura y refuerza el efecto modelador. Las braguitas están diseñadas con un patronaje de corsetería que al utilizar al menos cinco piezas crean una estructura elástica pero compacta que modela con firmeza el vientre y las caderas.

      

 

Cada vez más vemos en la época estival el gusto por una moda elegante. Donde se luzcan los elementos clásicos de la costura en tejidos y elementos aptos para el baño. El monokini es uno ejemplo de esta tendencia donde el gusto por el diseño y un estilismo cuidado brillan con luz propia.

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